Cuatro consejos para transformar tu trayectoria profesional
Hay muchos momentos en los que pensamos en transformar nuestra trayectoria profesional y reorientarla, ya sea para lanzar una empresa, conseguir una promoción interna o encontrar un nuevo empleo.
Apostar por tu reinvención profesional y trabajar tu posicionamiento personal es una de las mejores estrategias para conseguir tus objetivos en el mundo laboral. Como dice el gran empresario e inversor Warren Buffet: “nunca conseguirás mejor rentabilidad en la vida que cuando realmente inviertes en ti mismo”.
Cómo empezar tu estrategia de posicionamiento
Posicionarse no es solo una cuestión de la calidad del trabajo o de la brillantez del currículo, sino también de la capacidad que tengas para propagar tus conocimientos y así influir en otros. El retorno de este esfuerzo es una reputación sólida como experto en un ámbito, un elemento clave cuando empezamos a alcanzar la madurez profesional.
No se trata solo de tu huella digital o tus relaciones públicas, sino de orientar tus actividades online y offline de forma estratégica para mejorar no solo tu reputación, sino también tu propio expertise. El punto de partida para transformar tu trayectoria profesional mediante un plan de posicionamiento está en los cuatro consejos que incluyo a continuación
1. Identifica tus puntos fuertes: ¿en qué te has especializado?
Vivimos en un entorno cada vez más conectado y competitivo, en el que la robotización y la globalización hacen necesario que los profesionales se esfuercen más que nunca en aprender de forma permanente, adaptarse a los cambios y especializarse en campos de conocimiento.
Un programador informático acaba dominando unos pocos lenguajes de programación, igual que un abogado profundiza en un campo del derecho. Esos perfiles de experto suelen ser mucho más interesantes que los currículos en los que se observan muchos cambios de rumbo. Ojo, en ocasiones también es una cuestión de narrativa: cómo contamos nuestra trayectoria es clave para posicionarnos.
Mira hacia el pasado y analiza qué se te da mejor y cuál es el hilo conductor de tus experiencias, conocimientos y, por supuesto, gustos. Disfrutar de lo que haces es fundamental tanto para un buen posicionamiento como para tu reinvención hacia una carrera profesional exitosa.
2. Ponte metas: ¿cómo quieres transformar tu trayectoria profesional?
No puede haber un buen plan de posicionamiento sin introspección. En Thinking Heads guiamos a nuestros clientes por ese proceso de autodescubrimiento porque nos parece clave entender no solo su trayectoria profesional, sino los objetivos, valores y metas que les mueven. Responder a la pregunta “¿cuál es tu objetivo profesional” despejará muchas dudas a la hora de planificar tu estrategia.
Una vez contestada, desciende a lo concreto: ¿cuáles son los pequeños objetivos que debes cumplir para llegar allí? Si tus objetivos a corto plazo son irrealizables, lo más probable es que tu meta también lo sea.
Ten ambición, pero sé realista
3. Piensa en tu audiencia: ¿quién necesita escuchar tus ideas?
En el mundo de las ideas, los mercados son locales. Para dar un salto profesional no es necesario tener audiencias millonarias o llegar a todos los continentes. Si quieres empezar un pequeño negocio en tu ciudad o cambiar de trabajo, es importante que enfoques tu esfuerzo en identificar públicos que sean realmente relevantes.
- Personas que pueden beneficiarse de tu expertise, seguirte y admirarte: estudiantes, colegas, interesados en el tema…
- Personas con influencia: blogueros especializados, periodistas, expertos reconocidos. Pueden validar tu trabajo y ampliar tu área de influencia.
- Futuros clientes y empleadores. Tu perfil tiene que impresionarles no solo por lo que puedes demostrar, sino por lo que tu reputación dicen de ti.
4. Establece una rutina de trabajo: ¿qué vas a hacer y cuándo?
Grandes ideas fallan al desplegarse en forma de pequeñas acciones y obligaciones. Puede ser por no haber identificado correctamente nuestro mercado, por desconocimiento de las herramientas, o por la falta de perseverancia a la hora de trabajar.
Dosifica tu tiempo y tus energías: mientras mantienes ese trabajo que te da de comer, puedes empezar con pequeñas actividades.
Para tu transformación profesional es importante que canalices bien tus esfuerzos. Cuanta más dedicación pongas en posicionarte, más profundizarás en tus habilidades. En otras palabras: una estrategia de posicionamiento para tu transformación profesional bien planificada no solo te hará visible como experto, sino que te convertirá en uno.
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